Inmediatamente ha de lanzarse un programa de cambio social y económico con la conciencia clara de querer superar el sistema opresor y claramente orientado hacia la conquista de la autonomía y el renacimiento.
En esto casos el país a de mostrarse como antiimperialista, evitando toda ayuda exterior, impulsando la reducción de la deuda externa, estatizando los recursos naturales para evitar el poder y la influencia del FMI y el Banco Mundial.
Las políticas nacionales se han de centrar en cubrir las necesidades nacionales con una autosuficiencia productiva y una autosuficiencia alimenticia.
Pero como la masa no entiende más de lo que ha conocido, no entenderá el esfuerzo y el sufrimiento que esta política conlleva.
Los Amos Imperialistas conocen muy bien estas estrategias, entonces para contrarrestarlas han distribuído educación fácil (e inoperante, claro), sin esfuerzo; una distribución de prevendas que no exigen retribución laboral, sino sólo adhesión política. Una atención de salud regalada.
Un sistema judicial sumamente contemplativo con los delincuentes.
Quienes aspiren a nacionalizar deberán ser capaces de hacer frente al contra ataque imperialista, incrementando el control autoritario de la Nación, lo que será objeto de críticas airadas, ya que se le llenó la cabeza a las masas respecto al derecho a la libertad individual de decisión.
Los imperialistas inventaron los sindicatos y la prensa privada, para contrarrestar cualquier ilusión de poder presidencial. Esas dos entidades son manipuladas por intereses extranjers, ya que son sensibles a la coima.
Será preciso concentrarse en diseñar una estrategia para desenmascarar y neutralizar a los funcionarios corruptos, a los contrarrevolucionarios y a los "trabajadores perezosos".
Pero la estrategia más efectiva es sutil, y a de ser casi inadvertida: hay que cambiar la mente genérica; el conjunto de ideas que nos inculcaron. durante 5.000 años con empeño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario